Cómo crear una estructura web estratégica en WordPress: arquitectura, menús y URLs bien pensadas

Cuando hablamos de “estructura web” no nos referimos solo al menú principal o al número de páginas que creamos. Hablamos de cómo se organiza el contenido, de cómo se jerarquiza la información y de cómo se interconectan las diferentes secciones del sitio web. Una buena estructura mejora la experiencia de usuario, potencia el posicionamiento SEO y facilita la escalabilidad futura del proyecto.

En WordPress, donde todo se puede personalizar, es fácil caer en el error de construir sobre la marcha sin una visión global. El resultado suele ser una web confusa, con menús saturados, enlaces duplicados y páginas huérfanas que nadie encuentra.

Este artículo es una guía completa para evitar esos errores. Vamos a ver cómo diseñar y aplicar una estructura web estratégica, desde la arquitectura inicial hasta los menús y las URLs, utilizando WordPress como base.

1. Arquitectura de la información: pensar antes de crear

La arquitectura de una web debería parecerse más a los planos de una casa que a un puzzle improvisado. Antes de entrar a WordPress y ponerse a crear páginas de manera descontrolada es imprescindible definir tres cosas:

  • Cuáles serán las secciones principales
  • Qué subniveles existirán y por qué
  • Qué contenidos irán ligados o relacionados entre sí

Aquí resulta clave diferenciar entre lo que “nos gustaría tener” y lo que realmente necesita el usuario/a para navegar de forma fluida. Una regla habitual es no superar los tres niveles de profundidad, ni generar estructuras que obliguen al visitante a dar más de 3-4 clics para encontrar algo importante.

Por ejemplo, una estructura coherente para una web corporativa básica podría ser:

Este tipo de diagrama mental cumple una función esencial: convertir una idea abstracta (cómo queremos que funcione la web) en una representación lógica y visual. Al dibujar esa estructura —aunque sea con rectángulos y flechas sobre un folio a modo boceto—, comenzamos a entender de manera inmediata qué niveles de profundidad tendrá la información, qué secciones están al mismo nivel jerárquico y dónde puede haber solapamientos o confusión.

En esta fase, no estamos hablando aún de diseño visual, ni de WordPress, ni de menús. Estamos modelando la arquitectura de la información pura, y para eso es fundamental poder visualizarla con la mayor claridad.

Herramientas como XMind, Whimsical, Lucidchart o incluso Miro permiten crear estos esquemas fácilmente. Lo importante no es la herramienta, sino el ejercicio estratégico: forzarte a pensar cómo se organiza tu contenido antes de crearlo. Este paso evita errores, como duplicar páginas innecesarias, generar submenús incoherentes o crear rutas confusas que más adelante penalizarán tanto a tus usuarios/as como a tu posicionamiento SEO.

2. La jerarquía en WordPress: páginas, categorías y taxonomías

Una vez que definimos la estructura conceptual, llega el momento de trasladarla a WordPress. Aquí entra en juego el sistema jerárquico, que ofrece:

  • Páginas hijas: ideales para estructurar contenido fijo (por ejemplo, /servicios/mantenimiento).
  • Categorías y etiquetas: perfectas para clasificar entradas del blog, recursos, productos, servicios…
  • Custom post types: tipos de contenido personalizado diferentes a las entradas del blog, que resultan básicos si necesitas separar secciones muy específicas (testimonios, casos de estudio, fichas de producto o servicio…).

Es importante no mezclar estructuras. Es decir, imagina que tienes una sección de ‘Proyectos’, enfocada a modo de portfolio de trabajos. Evita crear páginas sueltas para cada uno (salvo que sea estrictamente necesario o necesites mostrar ese contenido por la razón que sea). Siempre es mejor crear un custom post type y organizarlo mediante taxonomías.

Además, el uso de breadcrumbs (migas de pan) ayuda a mantener esa jerarquía visible en todo momento. No es un simple detalle de navegación, sino una poderosa herramienta de orientación dentro de cualquier sitio web con una estructura jerárquica medianamente profunda. Su función principal es indicar al usuario dónde se encuentra exactamente dentro del sitio y qué nivel de profundidad está recorriendo respecto al inicio o las categorías superiores.

Por ejemplo, si un visitante accede a una entrada del blog dentro de una categoría concreta, el breadcrumb podría mostrar:
Inicio > Blog > SEO > Cómo estructurar URLs.

Esto no solo mejora la navegación, permitiendo que el usuario retroceda fácilmente a niveles anteriores, sino que también reduce la tasa de rebote al ofrecer rutas alternativas dentro del sitio.

Desde el punto de vista del SEO, los breadcrumbs mejoran la forma en la que los motores de búsqueda entienden la estructura de tu web. Google, de hecho, los reconoce, e incluso puede mostrarlos en los resultados de búsqueda como parte de los rich snippets, lo que incrementa el CTR (tasa de clics). Plugins como Rank Math, SEOPress o Yoast los gestionan de forma sencilla, y muchos temas como Astra, Kadence o GeneratePress los integran nativamente.

En definitiva, los breadcrumbs aportan claridad, coherencia jerárquica y beneficios tangibles tanto para el usuario como para tu posicionamiento.

3. Menús estratégicos: menos clics, más claridad

Un menú principal no debería reflejar todo el contenido de una web. No es un mapa web, sino un menú. Debe guiar al usuario/a hacia las secciones clave, hacia los lugares de la web que más interés tienes en mostrar, de la manera más sencilla y clara posible.

Errores habituales:

  • Incluir más de 6-7 elementos en el menú principal.
  • Utilizar nombres poco claros (‘Inicio’ junto a un logo que ya de por sí lleva a la home).
  • Mezclar niveles sin ningún orden (por ejemplo, páginas de nivel 2 o 3 directamente en la zona principal).

Lo ideal es que el menú:

  • Muestre solo las secciones principales.
  • Agrupe el contenido secundario en menús desplegables correctamente jerarquizados.
  • Utilice etiquetas claras y directas (‘Servicios’, ‘Blog’, ‘Contacto’…).
  • Mantenga coherencia entre lo que se ve y la URL real (evita siempre las URLs poco amigables, por ejemplo /page-id-123 y cosas similares).

WordPress ofrece, de forma nativa, una gestión muy flexible de los menús de navegación desde el apartado Apariencia > Menús, donde puedes crear múltiples estructuras y asignarlas a diferentes ubicaciones según lo permita el tema activo: cabecera, menú móvil, pie de página, sidebar, etc. Este sistema permite que una misma web pueda tener un menú principal limpio para el usuario/a general y otros más específicos (por ejemplo, uno legal en el footer o uno con accesos rápidos solo en móviles).

Los temas profesionales como Astra, GeneratePress, Kadence o Blocksy llevan esta funcionalidad a otro plano completamente distinto. Ofrecen compatibilidad con condiciones de visibilidad (mostrar un menú solo si el usuario está logueado, ocultarlo en ciertas plantillas, cambiarlo según el idioma…), además de herramientas como los megamenús, que permiten crear menús desplegables ricos en contenido, con iconos, columnas, descripciones o incluso widgets.

Igualmente, estos temas permiten crear menús independientes por dispositivo, lo que es fundamental para la usabilidad móvil: no todos los elementos del menú principal deben mostrarse igual en versión escritorio que en móvil. Tener esta capacidad de personalización mejora drásticamente la experiencia de usuario (UX) y evita errores comunes como los menús interminables o mal adaptados que colapsan la navegación en pantallas pequeñas.

4. URLs limpias y lógicas: cuando el SEO también es estructura

La estructura de las URLs es uno de esos elementos silenciosos que Google adora… o penaliza. En WordPress, puedes tener URLs muy limpias o desastrosas según cómo configures los enlaces permanentes (Ajustes > Enlaces permanentes).

Recomendaciones clave

  • Una de las primeras configuraciones que deberías revisar al crear una web WordPress es la estructura de los enlaces permanentes. En casi todos los casos, se recomienda seleccionar la opción que utiliza el nombre del post (/%postname%/) como parte de la URL, en lugar de estructuras menos amigables como /?p=123 o aquellas que incluyen fechas (/2025/05/05/titulo-del-post/). Usar la estructura /%postname%/ genera URLs limpias, y fáciles de leer, memorizar y compartir. También mejora la interpretación por parte de los buscadores: si tu post se llama “Diseño web para empresas”, la URL será tudominio.com/diseno-web-para-empresas, lo cual refuerza semánticamente el contenido sin necesidad de repetirlo en exceso. Eso sí, esta estructura requiere una buena planificación previa de los slugs y un control de las redirecciones en el caso de que alguna vez decidas modificar títulos. En webs grandes o con muchas publicaciones, también conviene tener cuidado con la posibilidad de generar conflictos de nombres si hay entradas y páginas con títulos similares.
  • Para contenidos jerarquizados, es importante reflejar esa jerarquía en la URL: tudominio.com/servicios/mantenimiento.
  • A evitar, números, guiones innecesarios o slugs automáticos (como page-id-341).
  • Una URL bien pensada debe incluir las palabras clave relevantes para el contenido que ofrece. Esto ayuda tanto a los usuarios/as como a los motores de búsqueda a entender de qué trata esa página incluso antes de entrar. Por ejemplo, una URL como tudominio.com/servicios/diseno-web-wordpress es mucho más informativa que tudominio.com/servicios/page-12. Ahora bien, esto debe hacerse con criterio. Incluir demasiadas keywords o repetirlas sin necesidad puede llevar a una sobreoptimización, algo penalizado por Google desde hace años. Frases artificiales como tudominio.com/seo-posicionamiento-seo-web-seo-barato no solo resultan forzadas, sino que generan desconfianza tanto en el buscador como en el usuario. Lo ideal es mantener las URLs claras, cortas, naturales y relevantes, usando las palabras clave solo cuando tienen sentido y cuando aportan valor real. De hecho, muchas veces es mejor optar por una URL ligeramente menos optimizada pero más legible.

Cuando decides incluir categorías o taxonomías personalizadas dentro de la estructura de las URLs (por ejemplo, tudominio.com/blog/seo/como-posicionar-mi-web), estás reforzando la jerarquía de contenido. Pero también estás introduciendo un riesgo si no lo haces con cuidado: la canibalización SEO.

Este problema ocurre cuando varias URLs de tu web compiten por la misma palabra clave o intención de búsqueda, lo que confunde a Google y puede diluir la autoridad de cada página. Si tienes, por ejemplo, una categoría llamada «Diseño web» (/blog/diseno-web) y además una página de servicios con la misma URL (/servicios/diseno-web), ambas podrían estar compitiendo por el término “diseño web”, dificultando el posicionamiento.

Para evitar esto:

  • Usa slugs diferenciados si los contenidos tienen finalidades distintas.
  • No repitas keywords exactas en secciones que no están relacionadas.
  • Define cuál es tu página principal para esa keyword y enlaza el resto hacia ella.

La clave está en mantener una jerarquía clara y coherente, sin duplicar intenciones ni términos.

Plugins como Rank Math, Yoast SEO o SEOPress ofrecen opciones avanzadas para personalizar los slugs, ajustar la visibilidad de las taxonomías, eliminar el prefijo /category/ o incluso cambiar la estructura general de URLs. Son herramientas muy potentes que facilitan la optimización técnica del sitio.

Sin embargo, es un error pensar que la instalación por sí sola de uno de estos plugins va a “arreglar” una mala o nula planificación. Estos complementos actúan sobre lo ya construido. Si la estructura jerárquica no está bien planteada desde el inicio, si las URLs son confusas o si hay canibalización interna, el plugin solo maquillará los síntomas, pero no solucionará el problema de fondo.

Por eso, lo más sensato es usar estos plugins después de haber diseñado una arquitectura estratégica. Así podrás usarlos para afinar detalles técnicos, gestionar redirecciones, añadir metaetiquetas o generar automáticamente los datos estructurados necesarios, en lugar de parchear errores estructurales.

5. Planificación a futuro: escalabilidad y mantenimiento

Una estructura estratégica no se queda en lo que necesitas hoy, sino que anticipa lo que puedes necesitar mañana. Si sabes que vas a ampliar servicios (o crees que existe la posibilidad de que así sea), crear nuevas líneas de negocio o publicar muchos contenidos, tu arquitectura debe permitirlo sin reconstruirlo todo desde cero.

Piensa también en cómo vas a mantener esa estructura: ¿habrá páginas que tendrán que actualizarse con frecuencia? ¿Crearás secciones temporales (para campañas, eventos, etc.)? ¿Hay elementos en el menú que cambiarán según el idioma o el tipo de usuario?

Todo esto debe estar previsto de antemano. De hecho, es siempre preferible sobredimensionar ligeramente la estructura que quedarse corto y tener que improvisar después.

Conclusión: estructura como cimiento, no como decoración

Una web con una arquitectura bien diseñada es mucho más que un escaparate bonito: es un sistema que facilita el descubrimiento, la navegación y la conversión. Una estructura clara y coherente mejora la experiencia de usuario, ayuda a los motores de búsqueda a indexar correctamente los contenidos y permite que el proyecto crezca de forma ordenada con el tiempo.

El error más habitual es subestimar esta fase inicial, saltando directamente al diseño visual o a la instalación de plugins. Pero la verdadera solidez de una web comienza mucho antes, cuando decides qué mostrar, cómo conectarlo y qué jerarquía tiene cada elemento.

WordPress pone a tu disposición todas las herramientas necesarias para construir esa estructura estratégica: páginas jerárquicas, taxonomías, menús condicionales, breadcrumbs, URLs limpias, redirecciones… Pero solo tú, como responsable del proyecto, puedes definir el plan que hará que todo eso funcione como un sistema integrado.

Recuerda: una web no se empieza por el diseño. Se empieza por la estrategia.

¿Estás empezando con tu web y quieres evitar errores estructurales? ¿O ya tienes una y sientes que está desorganizada y no funciona bien?

Puedo ayudarte a replantear y construir una estructura web profesional que funcione de verdad, con base en WordPress, SEO técnico y experiencia de usuario.

📸 Imagen: Kaleidico en Unsplash

Comenta este artículo

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Scroll al inicio
webCBZ
Resumen de privacidad

El sitio web de webcbz.com utiliza cookies para poder ofrecerte la mejor experiencia de usuario posible. La información de las cookies se almacena en tu navegador y realiza funciones tales como reconocerte cuando vuelves a webcbz.com, o ayudarnos a comprender qué secciones de la web encuentras más interesantes y útiles.

Puedes revisar la política de privacidad de este sitio web en la página de política de privacidad.