El ecosistema de WordPress ha sido históricamente un entorno colaborativo y abierto, donde múltiples empresas contribuyen y compiten para impulsar la plataforma más popular del mundo para la creación de sitios web. Sin embargo, recientemente ha estallado un conflicto que está generando tensiones: Automattic, la compañía de desarrollo fundada y dirigida por Matt Mullenweg (fundador de WordPress junto a Mike Little) y responsable, entre otras coas, de WordPress.com, y WP Engine, empresa proveedora de alojamiento especializado en WordPress, propiedad del fondo de inversión Silver Lake, se encuentran enfrentados en una disputa legal y de control que podría tener consecuencias significativas para la comunidad.
Origen del conflicto
Aunque en realidad los ecos del problema se remontan a tiempo atrás, el asunto estalla definitivamente cuando Automattic envió una carta de cese y desistimiento a WP Engine, exigiendo que la empresa dejara de usar ciertos términos que, según Automattic, violan ciertos derechos de marca y licencias. WP Engine, por su parte, respondió acusando a Automattic de intentar sofocar la competencia y de utilizar su influencia para obtener ventaja en el mercado.
La carta de cese y desistimiento incluía restricciones sobre el uso del término «WordPress» y otras marcas registradas asociadas, algo que sorprendió a muchos en la comunidad ya que WP Engine ha sido, tradicionalmente, un socio fuerte de la plataforma. Esto desencadenó una serie de declaraciones públicas y acciones legales entre las dos empresas que han escalado rápidamente. Automattic exigía que WP Engine cumpliera con sus obligaciones en el ámbito de la marca registrada en relación al uso de términos relacionados con WordPress, mientras lo definía como «un abuso de marca registrada y competencia desleal».
El papel de Automattic y la respuesta de WP Engine
Automattic ha sido criticada por utilizar su control sobre la marca y el proyecto WordPress para consolidar su posición en el mercado. La empresa sostiene que su objetivo es proteger la integridad del ecosistema y asegurar que se respete la propiedad intelectual de WordPress. No obstante, WP Engine y otros actores en la comunidad opinan que Automattic está abusando de su posición dominante.
Jeff Chandler, un conocido comentarista de la comunidad, expresó: “No es un rumor. Si no estás con Matt, estás en su contra y te pagará para que te vayas. Es una manera extraña de proceder”. Esta declaración refleja el descontento de algunos miembros de la comunidad con la dirección que está tomando el proyecto.
No hay que olvidar, sin embargo, la sucesión de maniobras que han llevado a la situación actual. Mullenweg denunció en su cuenta de X en septiembre de 2024 que WP Engine había intentado manipular el widget de noticias de WordPress para evitar que se mostraran sus publicaciones en los escritorios de sus clientes, por lo que se prohibió a WP Engine y a sus empleados cualquier tipo de acceso a WordPress y sus recursos, una medida que finalizó a los pocos días. Posteriormente, se anunció una modificación en la pantalla de acceso a las cuentas de WordPress.org: la inclusión de una casilla obligatoria para seleccionar la ausencia de cualquier tipo de relación con WP Engine (sin informar a los usuarios/as de las implicaciones de marcar dicha casilla). Esta ha sido, posiblemente, la acción más llamativa y con mayor repercusión de todos los acontecimientos del conflicto, ya conocido por la comunidad como ‘WPdrama‘. Pero tampoco hay que olvidar —tal y como recoge un documento de condiciones común entre Automattic y WP Engine— que el asunto se remonta a principios de 2023. Tampoco debe dejarse de lado lo que es WP Engine: una empresa que, aportando lo mínimo posible, se aprovecha al máximo de la contribución altruista, desinteresada y extensa de la comunidad para su propio beneficio. Es fundamental asumir que una de las empresas con mayor visibilidad del entorno WordPress —y que más se beneficia de ello— no contribuye en absoluto a enriquecer el proyecto.
Las implicaciones para la comunidad de WordPress
El conflicto no solo está afectando a las dos empresas implicadas, sino que también está dejando huella en los desarrolladores, agencias y usuarios finales de WordPress. Este punto en particular requiere un análisis más detallado de cada una de las áreas que podrían verse impactadas por este enfrentamiento.
Riesgo de fragmentación
El temor principal de la comunidad es la posibilidad de que WordPress se fragmente en diferentes versiones debido a la falta de consenso. Si WP Engine, o cualquier otra empresa de alojamiento afectada por estas políticas, decide bifurcar (“fork”, como se conoce en el mundillo informático) el código de WordPress, podríamos asistir a la aparición de nuevas variantes de la plataforma que competirían entre sí. Llevándolo al extremo, una (improbable) fragmentación generaría confusión y podría romper la compatibilidad de plugins y temas, afectando tanto a desarrolladores como a usuarios finales.
La fragmentación es un fenómeno que históricamente ha debilitado a otros proyectos de software de código abierto, como sucedió con OpenOffice y LibreOffice. Si bien en este caso la raíz del problema es una disputa sobre marcas y licencias, el resultado final podría ser el mismo: un ecosistema dividido y una base de usuarios que pierde confianza en la estabilidad de la plataforma.
Actualización: el 5 de octubre de 2024, Mullenweg pregunta en su cuenta de X sobre las posibilidades de utilizar una alternativa viable a Advanced Custom Fields (ACF), el plugin por antonomasia para construir webs con campos personalizados avanzados. Por ponerlo en contexto, ACF es propiedad de WP Engine, y Automattic anunció públicamente una grave vulnerabilidad de seguridad. La práctica, que va en contra de la divulgación responsable de seguridad, no gustó nada en ciertos sectores de la comunidad. El siguiente paso fue que Automattic, partiendo de la base de la vulnerabilidad, se apropió mediante un fork del plugin oficial alojado en el repositorio de WordPress, cambiándole el nombre por Secure Custom Fields con la excusa de publicar una actualización de seguridad. Una maniobra que no vulnera la legalidad, pero que es, cuanto menos, discutible.
Percepción de control y gobernanza
La percepción de que Automattic tiene demasiado control sobre la plataforma está ganando fuerza. Los comentarios en muchas de las webs de referencia de la comunidad reflejan que muchos desarrolladores y colaboradores sienten que el proyecto se ha convertido en algo demasiado centralizado y que las decisiones importantes se toman unilateralmente.
Un usuario incluso sugirió que el Departamento de Justicia (DOJ) de EE.UU. debería intervenir para “liberar a WordPress del control de Matt Mullenweg”. Aunque esto puede sonar extremo, subraya la magnitud del descontento dentro de la comunidad. Si Automattic sigue aplicando estas tácticas, podría surgir una petición más formal para separar el control del proyecto de manos de una sola entidad.
Impacto en los desarrolladores y agencias
Muchas agencias y desarrolladores que utilizan WP Engine como proveedor de alojamiento han comenzado a experimentar limitaciones en la plataforma. Según reportes de clientes, WordPress.org ha bloqueado a los usuarios de WP Engine de actualizar e instalar plugins a través del panel de administración de WordPress, forzándolos a realizar estos procesos manualmente.
Esta decisión de bloquear ciertas funciones está afectando la operativa diaria de miles de desarrolladores y agencias que confían en WP Engine para gestionar sus sitios. Como resultado, algunos usuarios están considerando migrar a otros CMS o incluso abandonar la plataforma de WordPress por completo. Esta pérdida de confianza en la infraestructura de WordPress podría tener un impacto negativo en la adopción de la plataforma a largo plazo.
Declaraciones y reacciones
El conflicto ha generado una cascada de reacciones en toda la comunidad de WordPress. Entre las más destacadas se encuentran:
- Matt Mullenweg, CEO de Automattic, ha defendido la postura de la compañía diciendo que la protección de la marca y la propiedad intelectual es esencial para el futuro de WordPress. Sin embargo, esta postura ha sido interpretada por muchos como un intento de sofocar a los competidores. Es difícil olvidar, no obstante, la crucial aportación que Mullenweg ha hecho al ecosistema y su incansable trabajo en pro de WordPress.
- WP Engine, por su parte, ha acusado a Automattic de utilizar tácticas agresivas para excluir a los competidores del mercado. La empresa ha señalado que esta situación podría poner en peligro la neutralidad del ecosistema WordPress y forzar a los usuarios a elegir entre proveedores.
- Michael Edwin, un colaborador de la comunidad, declaró: “Time for the DOJ to get involved. Automattic needs to be broken up. Both WordPress and the wordpress.org repository need to be freed from Matt and made truly independent” (‘Es hora de que se involucre el Departamento de Justicia de EE UU. Automattic debe disolverse. Tanto WordPress como el repositorio wordpress.org deben liberarse de Matt y hacerse verdaderamente independientes’). Aunque su comentario fue criticado por otros usuarios, refleja un creciente malestar con la estructura de gobernanza actual del proyecto.
- Bruce, otro miembro de la comunidad, comentó que los clientes de WP Engine se están viendo penalizados en esta lucha de poderes: “Regular people and devs become collateral damage in the fight between egos” (‘La gente normal y los desarrolladores se convierten en los daños colaterales de esta lucha de egos’).
Estas declaraciones reflejan la gravedad del conflicto y el impacto que está teniendo no solo a nivel empresarial, sino también en la percepción de la comunidad respecto al futuro de la plataforma.
Conclusiones: ¿qué sigue para WordPress?
El desenlace de esta disputa, que será sobre todo judicial entre las partes implicadas y con toda seguridad afectará poco en lo relativo al ámbito de los miles de profesionales que utilizan y contribuyen a que WordPress sea lo que es hoy, aún está por verse. Pero una cosa es clara: el conflicto ha puesto de relieve la necesidad de un enfoque más transparente y colaborativo en la gobernanza de WordPress. Los desarrolladores y usuarios de la plataforma se están viendo arrastrados a una batalla cuyas consecuencias, en última instancia, podrían cambiar el curso del proyecto y la manera en que las empresas interactúan con él.
Con más de un 40% de los sitios web del mundo usando WordPress, el resultado de este conflicto podría tener repercusiones profundas no solo para Automattic y WP Engine, sino para toda la comunidad que sustenta la plataforma.